EE.UU. prevé incrementar perforación petrolera en aguas marítimas
Los equipos de respuesta de los barcos de bomberos rocían agua sobre los remanentes de la plataforma petrolífera submarina Deepwater Horizon de BP el 21 de abril de 2010. U.S. Coast Guard | AP

WASHINGTON — El gobierno de Estados Unidos confirmó que prevé autorizar perforaciones petroleras en casi todas las aguas del país en alta mar, sin el amparo de protecciones anteriores para los océanos Ártico, Atlántico y Pacífico.

Según el secretario de Interior, Ryan Zinke, el borrador del programa 2019-2024 dejaría disponible para su licitación más del 90 por ciento de la superficie total de la plataforma continental exterior, incluidas áreas vetadas por la anterior administración del presidente Barack Obama.

‘Queremos aumentar la industria energética en alta mar de nuestra nación, en lugar de rendirla lentamente a costas extranjeras’, expresó Zinke.

La iniciativa, destacó, forma parte de la agenda Dominio Energético Estadounidense, impulsada por el Ejecutivo del mandatario Donald Trump.

De acuerdo con el Departamento del Interior, están identificadas 47 licitaciones potenciales, lo que sería ‘el mayor número de arriendos en la historia de Estados Unidos’ en un plan federal de cinco años.

Poco antes de concluir su mandato, Obama prohibió nuevas perforaciones en busca de crudo y gas en aguas federales del Atlántico y el Ártico, para proteger 46,5 millones de hectáreas frente a Alaska y 1,5 millones de hectáreas en el Atlántico, desde Nueva Inglaterra a Chesapeake Bay.

La nueva decisión de explotar la mayoría de las aguas litorales estadounidenses transitará en dirección contraria y ‘se aplicaría a partir de 2019 tras una moratoria de cinco años’, refirió Zinke en una conferencia telefónica.

Los letreros de Hazmat se colocan a lo largo de los muelles de la Costa del Golfo luego del desastre de Deepwater Horizon de BP, julio de 2010. Hazmat signs are posted along Gulf Coast docks after BP’s Deepwater Horizon disaster, July 2010. Blake Deppe | PW

Frente el anuncio, ecologistas, funcionarios estatales y grupos empresariales reiteraron su preocupación por los posibles derrames de hidrocarburos y el impacto sobre el turismo.

‘Más que escuchar a quienes deben servir, Trump y Zinke escuchan a industriales que financiaron su campaña e integran su administración’, estimó Sierra Club, una de las principales organizaciones ambientalistas de Estados Unidos.

A juicio de la entidad, ‘la expansión de plataformas offshore encuentra fuerte oposición de representantes de los dos partidos (republicano y demócrata) en localidades de litorales, así como de gobernadores de estados como Nueva Jersey, Carolina del Norte y del Sur, Virginia y Florida’.

Para el gobernador de Florida, Rick Scott, el plan constituye una amenaza para los recursos naturales de su estado.

El director ejecutivo del Sierra Club, Michael Brune, emitió la siguiente declaración:

“Donald Trump y su secretario de Interior, Ryan Zinke, están tratando de vender las comunidades costeras, las aguas y el clima de todos para satisfacer a los contaminadores corporativos. Millones de personas de todo el país se han declarado claramente en contra de las perforaciones costeras. Pero en lugar de escuchar al público para el que trabajan, Trump y Zinke hacen caso a la industria que financia sus campañas y ocupa su administración.

“Trump y Zinke están actuando en contra de los designios del pueblo estadounidense en su intento de expandir las perforaciones costeras y socavar las protecciones permanentes de las aguas públicas de nuestro país. El Sierra Club continuará hombro con hombro con las comunidades costeras para luchar contra este plan descabellado, y actualmente estamos examinando nuestras opciones legales para asó hacerlo”.

 

Prensa Latina


CONTRIBUTOR

Prensa Latina
Prensa Latina

Agencia de Noticias Latinoamericana S.A. (Latin American News Agency) Prensa Latina radicada en Cuba. Genera, procesa y ofrece información del país y el resto del mundo. Prensa Latina tiene el propósito de ofrecer al mundo una visión de la realidad de Cuba y Latinoamérica diferente de la que ofrecen los grandes monopolios mediáticos.

Comments

comments